miércoles, 4 de mayo de 2011

El castigo

Tantum aberant summo, quantum semel ire sagitta

Tanto distaban de lo alto cuanto de una vez marchar una saeta

missa potest: flexere oculos et mersa palude

enviada puede: volvieron sus ojos y sumergido en una laguna

cetera prospiciunt, tantum sua tecta manere,

todo lo demás contemplan, que sólo sus techos quedan;

dumque ea mirantur, dum deflent fata suorum,

y mientras de ello se admiran, mientras lloran los hados de los suyos,

illa vetus dominis etiam casa parva duobus

aquella vieja, para sus dueños dos incluso cabaña pequeña,

vertitur in templum: furcas subiere columnae

se convierte en un templo: las horquillas las sustituyeron columnas,

stramina flavescunt aurataque tecta videntur

las pajas se doran, y de oro cubiertos los techos parecen.

caelataeque fores adopertaque marmore tellus.

y cinceladas las puertas, y cubierta de mármol la tierra

No hay comentarios:

Publicar un comentario